La religión no merece ni más ni menos respeto que otras producciones notables de la imaginación humana. Podemos reirnos de Marx, Jesús y Mahoma, del cristianismo y del islam. Exigir a los no creyentes que se comporten como creyentes ante símbolos religiosos es una excesiva pretensión. Lo que las religiones llaman “respeto” no es más que la sumisión universal a su particular imaginario social.
-Robert Redeker
(filósofo francés, amenazado de muerte por una fatwa desde 2006)
Hoy 30 de septiembre se celebra el Día de la Blasfemia o Día Internacional del derecho a blasfemar.
Lejos de ser un día en que se aprovecha para insultar símbolos religiosos y dioses ajenos, lo que se busca es defender el derecho de expresión.
Ninguna religión debiera estar por encima del derecho de expresión.
La imagen me llegó por mail gracias a De La Barca. Desconozco su autor.